Table of Contents
Los kalanchoes son plantas de interior suculentas populares que son favorecidas por su naturaleza poco exigente y su bonita flor. Flores diminutas de colores brillantes aparecen en una variedad de tonos, desde rojo, magenta, amarillo y naranja hasta blanco. La especie más conocida es Kalanchoe blossfeldiana, también conocida como Katy en llamas, planta panda o emoción de la viuda.
Encendiendo
La Kalanchoe es una planta amante del sol: en interior requiere unas 12 horas de luz al día. Por ello, se recomienda colocarlo en las zonas más soleadas de tu hogar: las habitaciones orientadas al norte no son adecuadas. Elija ventanas este u oeste durante la temporada de primavera-verano, y mueva la planta a los alféizares de las ventanas orientadas al sur durante el otoño y el invierno. Si cree que la luz del sol en su lugar no satisfará las necesidades de la flor, intente usar lámparas LED. Con la cantidad adecuada de luz, el kalanchoe florecerá constantemente.
La temperatura
Kalanchoe no es muy exigente con el régimen de temperaturas. Prosperará en casi cualquier condición: la única regla es no ir a los extremos. Durante la temporada de calor, las temperaturas pueden variar de 64 a 82 ˚F (18 a 28 ˚C), y durante el otoño y el invierno, de 57 a 64 ˚F (14 a 18 ˚C). Este régimen de temperatura durante el período de latencia es crucial: la planta descansa y pone nuevos cogollos. Sin latencia, kalanchoe no podrá florecer. Además, es poco probable que la planta sobreviva a las caídas de temperatura de 50 ˚F (10 ˚C) o menos.
Riego
Para el riego, use agua blanda y bien sedimentada. Esta planta es suculenta, por lo que el riego excesivo puede provocar problemas graves como la pudrición. Riegue el kalanchoe solo después de que se seque la capa superior de la mezcla para macetas. Sin embargo, el riego por agua hará que las hojas se caigan, así que esté atento. En invierno, riegue su planta verde con menos frecuencia.
Pulverización
Kalanchoe no requiere nebulización regular: como cualquier suculenta, está acostumbrada a condiciones áridas, por lo que la humedad en la mayoría de los hogares le conviene. Puedes rociar la planta de vez en cuando para quitar el polvo. Algunos aficionados a la jardinería también rocían estas especies durante el calor del verano, pero esto no es obligatorio. Las placas de las hojas de una planta de este tipo son carnosas, a veces hay pubescencia en su superficie, por lo que la humedad se evapora muy lentamente.
Fertilizante
Recomendamos abonar el arbusto no solo en primavera-verano sino también en otoño cuando se están formando sus cogollos. Use fertilizantes líquidos para cactus y suculentas dos veces al mes. Recuerda diluir en dos la dosis recomendada: un abono excesivo puede dañar gravemente a la planta.
Poda
La mayoría de las especies de kalanchoe pierden sus hojas viejas, por lo que las ramas viejas pueden perder su decoración. Dichos hollines se pueden cortar. Realice la poda durante la temporada de crecimiento activo y use siempre instrumentos estériles y muy afilados. Se pueden plantar hojas y ramas cortadas, así como kalanchoe, como la mayoría de las suculentas, se puede desarrollar a partir de una sola hoja.
Compra y selección de una planta
Al elegir un Kalanchoe con flores decorativas, preste atención a la cantidad de flores en flor. Es mejor tomar una planta con más capullos sin abrir; en este caso, tendrá más tiempo para disfrutar de la floración.
Trasplante
Kalanchoe se trasplanta cada dos años para refrescar el suelo o cambiar una maceta por una planta demasiado grande. La mezcla perfecta para macetas consiste en una mezcla de césped, tierra de turba y un poco de arena. Se requiere un drenaje hecho de guijarros, arcilla expandida o ladrillos rotos en el fondo de la maceta para evitar la pudrición de la raíz.
Enfermedades y plagas
Los problemas más comunes con Kalanchoe incluyen exceso de riego y falta de luz. Cuando la planta no recibe suficiente luz solar, se vuelve de piernas largas. El follaje pierde su color brillante y se vuelve pálido. Además, esto podría provocar la caída de las hojas.
Luego de una abundante floración, la planta requiere una gran porción de nutrientes para continuar su desarrollo. Si notas que tu mascota ha dejado de crecer o ha perdido las hojas justo después de estar en flor, ya es hora de que le apliques algún fertilizante. Además, considere replantar kalanachoe en una mezcla fresca para macetas; esto también ayudará.
Otros problemas comunes incluyen:
- Las hojas se secan y se caen. Esto podría ser un signo de falta de agua, baja humedad o infestación de plagas.
- La planta adquiere manchas blandas marrones o negras o moho cuando está demasiado húmeda, especialmente a bajas temperaturas en habitaciones mal ventiladas.
- Las hojas son grandes, de color verde jugoso, pero no se produce la floración. Este es un síntoma común de la sobrealimentación con fertilizantes, especialmente fertilizantes orgánicos o minerales con una alta proporción de nitrógeno.